Establece la responsabilidad de la limpieza y el mantenimiento de terrenos baldíos, donde ante la falta de cuidado proliferan todo tipo de alimañas y malezas poniendo en peligro la salud y la integridad de la población.
Los dueños de terrenos baldíos son responsables de mantenerlos libres de todo tipo de residuos.
Será el Municipio quien emplazará a todos aquellos propietarios de inmuebles que, previa inspección por parte del personal idóneo haya constatado la infracción y determine el peligro a la salud y seguridad de la Comunidad.
El artículo 4 de dicha Ordenanza determina que luego de dos intimaciones a los propietarios, la Autoridad a competente procederá a las tareas pertinentes de limpieza con la finalidad de resguardar la salud de la población y cuyo gastos demanden dicha actividad será a cargo de los propietarios de los inmuebles afectados.